30 Discos
Día 7: El que no te cansas de oír en CD, por más tecnología que haya

Wilco
Yankee hotel foxtrot
2002

Sin lugar a dudas, este disco es uno de mis favoritos de todos los tiempos, pero en lo que más pienso en este momento es en lo extraño que fue cómo conocí a Wilco. En 1997 fui a visitar a mis queridos amigos Mary y Alex a Bogotá y como siempre, les pedí que me llevaran a todas las tiendas de discos baratos que pudieran. Fuimos a muchas tiendas de discos usados ya que en esa época había muchas, pero recuerdo en particular que me llevaron a un outlet de Prodiscos en algún centro comercial de la capital. Allí, había una promoción que decía que si comprabas 3 discos te hacían un descuento del 40%. Recuerdo también que el único disco que tenía en mis manos era el “In it for the money” de Supergrass y necesitaba otros dos. Después de mucho mirar, cogi de una canasta de promoción uno de The September when llamado “Hugger mugger” sólo por la portada y el “AM” de Wilco. Así fue mi primer encuentro con Wilco, puro descarte. Muchas veces en la vida pasan esas cosas y cuando te sorprenden como me sorprendió este grupo esa vez, es mucho mejor. Nunca me he arrepentido de haber cogido ese disco de esa canasta de promoción y de hecho, a partir de ahí he comprado uno a uno, cada disco que han ido publicando.

Yankee hotel foxtrot es de mis favoritos y comenzar un día escuchando “Kamera”, “Pot Kettle Black”, “Ashes Of American Flags” o “Jesus, etc” no tiene precio. Cada track está tan bien pensado, tan bien estructurado que es difícil quitarlo antes de que suene en su totalidad. Y es que se demoraron 4 años haciéndolo y lo rehicieron un poco más de 3 veces. De hecho, la sociedad Bennett-Tweedy se terminó debido a este disco y a lo difícil que fue su creación y posterior realización. Además, luego de terminarlo, su disquera Warner lo rechazó y terminaron publicándolo en “Nonesuch” que es una subsidiaria de Warner, lo que quiere decir que Warner pagó dos veces por el mismo disco sin saberlo. Entonces, Yankee hotel foxtrot es un disco muy valioso, lleno de historias, cargado de muchos sentimientos y de esos que ya no se hacen.